

Una impresionante moneda de oro española acuñada en 1609 para el rey Felipe III se ha convertido en protagonista del mercado numismático europeo tras alcanzar una cifra histórica en subasta. La pieza, conocida como centén, ha pasado de ser un símbolo de poder real a un objeto de deseo para coleccionistas de alto nivel.
En una puja celebrada en Suiza por la casa ginebrina Numismatica Genevensis, esta moneda batió el récord del continente al situarse como la más cara jamás adjudicada en Europa. Su peso excepcional, su origen ligado al Siglo de Oro español y su trayectoria a lo largo de los siglos han contribuido a disparar el interés y el precio final.
Un centén de Felipe III que hace historia en la subasta
La protagonista de la jornada es un centén de oro de 1609, una pieza equivalente a 100 escudos de la antigua moneda española, emitida durante el reinado de Felipe III (1578-1621). No se trata de una moneda corriente de circulación diaria, sino de una acuñación extraordinaria vinculada al boato de la corte y a la representación del poder real.
La casa de subastas Numismatica Genevensis detalló que la moneda pesa 339 gramos de oro, una cifra muy superior a la de las emisiones habituales de la época. Este volumen de metal precioso, unido a su rareza y a su excelente conservación, la sitúa en un nivel muy exclusivo dentro del coleccionismo internacional.
La puja, celebrada un lunes en Ginebra, arrancó con un precio de salida de 2 millones de francos suizos, ya de por sí una cantidad notable para una pieza numismática. Sin embargo, el interés de varios postores hizo que la cifra subiera con rapidez hasta alcanzar los 2,82 millones de francos suizos (unos 2,4 millones de euros o 3,49 millones de dólares), antes de sumar las comisiones de la casa.
Incluyendo los gastos asociados a la venta, el importe total desembolsado por el comprador llegó a situarse en torno a 2,8 millones de francos suizos, lo que equivale aproximadamente a 3 millones de euros. Esta cantidad consolida al centén de Felipe III como la moneda más valiosa jamás vendida en una subasta europea, según confirmó la propia firma ginebrina.
Desde Numismatica Genevensis se insistió en que la adjudicación no solo refleja el valor del oro, sino sobre todo la combinación de importancia histórica, rareza extrema y relevancia para la historia monetaria española. En palabras de sus responsables, se trata de una pieza que difícilmente volverá al mercado a corto plazo.

Una moneda de prestigio: origen, oro americano y función simbólica
El centén fue acuñado en la ceca de Segovia, una de las casas de moneda más destacadas del siglo XVII. Este taller real, dotado de innovaciones técnicas para la época, jugó un papel clave en las emisiones de la monarquía hispánica, y sus piezas son hoy especialmente apreciadas por coleccionistas y especialistas.
Para fabricar esta moneda se empleó oro procedente de América, traído por los conquistadores durante la expansión del Imperio español. Ese metal precioso, extraído de territorios coloniales, se transformó en un objeto pensado no tanto para circular por manos comunes como para exhibir la capacidad económica y el poderío de la Corona.
El fundador de Numismatica Genevensis, Alain Baron, explicó que esta no era una moneda de uso cotidiano, sino más bien una demostración de riqueza destinada a un entorno muy restringido. Su valor en la época equivalía al sueldo de varios años de un trabajador, lo que deja claro hasta qué punto era un artículo de lujo reservado a la élite.
Baron describió la pieza como un auténtico regalo regio, concebido para ser ofrecido entre monarcas o grandes personajes de la nobleza europea. Según sus palabras, el nuevo propietario tiene la sensación de ponerse a la altura de un rey, ya que originalmente fue un rey quien la usó como obsequio en el ámbito diplomático o cortesano.
Este tipo de monedas, de gran módulo y altísimo valor, cumplían una función representativa muy marcada: reforzar la imagen de poder de la monarquía española en un momento en que el Imperio aún conservaba vastos territorios y recursos, y en el que la circulación de metales preciosos era un instrumento clave de influencia política.
Un recorrido singular: de Segovia al mercado internacional
Además de su relevancia histórica, la moneda sobresale por un itinerario coleccionista lleno de saltos geográficos. Tras su acuñación en Segovia en 1609, se le pierde la pista durante siglos, como ocurre con muchas piezas de alta gama que permanecen en manos privadas o en tesoros familiares sin documentación pública.
Se sabe que la moneda reapareció en Estados Unidos hacia la década de 1950, donde fue adquirida por un coleccionista de Nueva York. Este comprador la mantuvo en su colección durante varios años, hasta que decidió venderla a un coleccionista español aproximadamente una década más tarde.
Con el paso del tiempo, la pieza entró a formar parte de la famosa colección Caballero de Yndias, una de las más reconocidas en el ámbito numismático hispano. Esta colección fue reunida por un coleccionista de origen vasco que residía en Cuba y se convirtió en referencia obligada para los interesados en monedas españolas y coloniales.
En 2009, la colección Caballero de Yndias se subastó en Barcelona a través de la firma Áureo & Calicó, y entonces el centén pasó a manos de un comprador suizo. A partir de ahí, volvió a cambiar de propietario en una operación privada, hasta llegar al titular que decidió ponerla en venta de nuevo en la subasta ginebrina donde ha alcanzado el récord.
La identidad del último dueño antes de la puja no ha sido revelada, un detalle habitual en este tipo de operaciones de alto nivel. Lo que sí se ha confirmado es que el nuevo propietario se une a una breve lista de coleccionistas que han tenido esta pieza en sus manos, reforzando su aura de exclusividad dentro del mercado europeo y mundial.
El nuevo récord europeo y su comparación con otras monedas históricas
Con el precio alcanzado en Ginebra, el centén de Felipe III desbanca al anterior récord europeo para una moneda en subasta. Hasta ahora, esa marca la ostentaba una pieza de 100 ducados de 1629, acuñada en el Sacro Imperio Romano Germánico bajo el gobierno de Fernando III de Habsburgo.
Esa moneda de 100 ducados se había vendido recientemente por 1,95 millones de francos suizos (en torno a 2,11 millones de euros), según explicó Frank Baldacci, presidente de Numismatica Genevensis. La cifra alcanzada por el centén español supera con claridad esa cantidad, consolidando el nuevo liderazgo en el mercado europeo.
Aun así, si se amplía la mirada al conjunto del continente, existen varias monedas raras rusas que, en determinadas subastas, han logrado precios también muy elevados, compitiendo en la franja alta del mercado numismático. Este segmento de piezas excepcionales suele concentrar la atención de grandes coleccionistas privados y de algunas instituciones.
En el plano global, la moneda española no alcanza el primer puesto absoluto, pero se sitúa sin duda entre las más valoradas. El récord mundial lo ostenta una pieza de 20 dólares estadounidenses acuñada en 1933, un célebre ejemplar conocido como «Double Eagle». Esa moneda alcanzó en 2021 más de 18 millones de dólares, es decir, alrededor de 15,4 millones de euros.
La comparación ayuda a entender que el centén de Felipe III, aun sin llegar a esas cifras astronómicas, se coloca en un selecto grupo de monedas históricas de máximo nivel, en el que pesan tanto el contexto histórico y político como el grado de conservación, la rareza y la demanda entre coleccionistas especializados.
La subasta de esta pieza pone de relieve cómo la herencia monetaria de la España de los Austrias sigue despertando un interés notable en el mercado internacional. Entre el atractivo del oro americano, la historia de la ceca de Segovia y la mística de los grandes tesoros reales, no sorprende que un centén como este haya terminado marcando un antes y un después en las subastas europeas.
El caso de esta moneda de 1609 ilustra hasta qué punto una pieza única puede concentrar siglos de historia, arte y poder político en un solo objeto, y cómo el coleccionismo numismático se ha convertido en un espacio donde se cruzan la pasión por el pasado, la inversión y la búsqueda de exclusividad en el contexto europeo y mundial.
Postposmo
Fuente de esta noticia: https://www.postposmo.com/la-moneda-de-oro-espanola-que-rompe-todos-los-records-en-europa/
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