El expresidente de Brasil, Jair Bolsonaro, fue llevado el sábado (22) a la superintendencia de la Policía Federal en Brasilia tras intentar romper su tobillera electrónica usando un soldador. Estaba bajo arresto domiciliario y siendo vigilado.
Debido al delito y a señales de un intento de fuga, Bolsonaro está detenido en una celda de 12 metros cuadrados. Este domingo asistió a una audiencia de custodia.
La información sobre el intento de romper la tobillera consta en en un informe de la Secretaría de Administración Penitenciaria del Distrito Federal (Seap), enviado al Supremo Tribunal Federal (STF) junto con un vídeo en el que Bolsonaro admite el daño. «Fue curiosidad», explicó, informando que el intento de abrir el equipo ocurrió al final de la tarde del viernes (21).
El magistrado del STF Alexandre de Moraes ordenó la prisión preventiva y levantó el secreto sobre el informe y el video de Seap. Dio 24 horas para que la defensa de Bolsonaro se pronunciara sobre el intento de manipulación del dispositivo de monitoreo.
«El equipo mostraba señales claras y significativas de daños, con marcas de quemaduras en toda su circunferencia donde se cierra la funda. Durante el análisis, se le preguntó al supervisado sobre la herramienta utilizada, y él respondió que había usado un soldador para intentar abrir el aparato», indica el informe.
La tobillera fue sustituida por otro dispositivo.
El viernes, el senador Flávio Bolsonaro organizó una vigilia de oración en redes sociales cerca de la casa donde su padre estaba en arresto domiciliario desde el 4 de agosto.
En su orden de prisión preventiva, Moraes menciona la violación de la tobillera y dice que la reunión podría causar disturbios o facilitar «un intento de fuga del acusado».
Bolsonaro, sentenciado a 27 años y tres meses de prisión por su participación en la trama golpista, podría comenzar a cumplir su condena en las próximas semanas, al igual que los otros acusados.
La semana pasada, el tribunal supremo rechazó las mociones de aclaración presentadas por el expresidente y otros seis acusados, quienes buscaban revertir sus condenas y evitar cumplir sus penas en régimen cerrado.
Este domingo (23) vence el plazo para que las defensas presenten sus recursos finales. Si se rechazan, las sentencias se ejecutarán.
El viernes, la defensa del expresidente pidió que se le otorgara arresto domiciliario humanitario a Jair Bolsonaro, pero Moraes rechazó la solicitud el sábado. Los abogados argumentan que Bolsonaro sufre enfermedades permanentes que requieren un «seguimiento médico intenso» y, por eso, debería permanecer en arresto domiciliario.
La defensa ha anunciado que apelará la decisión de prisión preventiva.
Bolsonaro estaba en arresto domiciliario por violar las medidas cautelares establecidas por la justicia. Estas medidas se determinaron en una investigación en la que el diputado federal Eduardo Bolsonaro, hijo del expresidente, es investigado por colaborar con el gobierno del presidente estadounidense Donald Trump para promover represalias contra el gobierno brasileño y jueces del tribunal supremo.
Fuente de esta noticia: https://agenciabrasil.ebc.com.br/es/justica/noticia/2025-11/bolsonaro-detenido-tras-manipular-tobillera-electronica
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