

El filósofo y ensayista Antonio Escohotado, uno de los pensadores más influyentes del siglo XX en España, ha vuelto a ser protagonista en redes sociales gracias a un vídeo que rescata una de sus reflexiones más poderosas sobre la educación y la prosperidad de las naciones. Su mensaje, directo y atemporal, se ha convertido en un recordatorio sobre lo que realmente construye la riqueza de un país.
@younglibertario Antonio Escohotado: «Un país es rico porque tiene educación». #educacion #valores #respeto
“Un país no es rico porque tenga diamantes o petróleo, un país es rico porque tiene educación”, afirmaba Escohotado en la grabación, donde destacaba que la educación no se limita a la instrucción académica, sino a la forma en que las personas se comportan con los demás. Para él, la verdadera prosperidad surge de la cultura del respeto y la conciencia colectiva, no de los recursos naturales ni del dinero.
El pensador, autor de obras tan relevantes como Los enemigos del comercio, explicaba que “educación significa que aunque puedas robar, no robas”, una frase que resume su visión ética sobre la convivencia social. A lo largo de su intervención, subraya cómo los pequeños gestos cotidianos reflejan la madurez moral de una sociedad.
Escohotado ilustraba su idea con ejemplos sencillos: “Educación es que vas por la acera, es estrecha, y te bajas diciendo ‘disculpe’. Educación es dar las gracias al pagar una factura, dejar propina y volver a agradecer cuando te devuelven el cambio”. Para él, esos hábitos de cortesía no son simples formalidades, sino el fundamento invisible que sostiene la convivencia y el desarrollo. «Cuando un pueblo tiene educación, un pueblo es rico”, sentenciaba Escohotado. En sus palabras, la auténtica riqueza de una nación no se mide por su PIB ni por sus recursos naturales, sino por el grado de respeto y conocimiento que habita en sus ciudadanos.
Fuente: El Confidencial
