

En Bolivia, el cáncer de mama representa uno de los mayores desafíos para la salud pública, siendo el segundo tipo de cáncer más frecuente entre las mujeres del país. En respuesta a esta problemática, el Sistema Único de Salud (SUS) ha establecido medidas integrales que garantizan el acceso gratuito y oportuno a servicios médicos especializados, desde la detección temprana hasta el tratamiento completo y la recuperación.
Acceso universal a servicios oncológicos
El SUS se ha convertido en una herramienta clave para combatir el cáncer de mama en Bolivia, marcando un hito en la garantía de igualdad de oportunidades en el acceso a la salud. Esto resulta especialmente significativo en un contexto donde los recursos económicos suelen ser un obstáculo para muchas mujeres. Según datos proporcionados por Reyna Copana, responsable del Programa Nacional de Lucha Contra el Cáncer del Ministerio de Salud y Deportes, entre 2016 y 2024 se registraron 9.052 casos de cáncer de mama en el país, de los cuales el 62% fueron atendidos a través del SUS. Este sistema también cubre exámenes especializados, cirugías oncológicas, quimioterapia, radioterapia y medicamentos de alto costo, además de cuidados paliativos.
Promoción de la detección temprana
La detección temprana sigue siendo la estrategia más eficaz para enfrentar el cáncer de mama. En este sentido, el Ministerio de Salud y Deportes refuerza durante el “Mes Rosa” las campañas de sensibilización y promoción de la salud, incentivando prácticas como el autoexamen de mama y la realización de mamografías anuales. Mientras que el autoexamen es recomendado para todas las mujeres mayores de 18 años, las mamografías son sugeridas a partir de los 40 años, incluso en ausencia de síntomas. Estas acciones buscan identificar irregularidades en etapas iniciales, aumentando significativamente las posibilidades de éxito en los tratamientos.
Grupos más afectados
Las estadísticas muestran que la mayor incidencia del cáncer de mama se concentra en mujeres entre los 50 y 59 años, seguido por aquellas entre los 40 y 49 años. Este dato subraya la importancia de implementar políticas públicas que prioricen la atención y prevención en estos grupos etarios.
Derechos garantizados por ley
En Bolivia, las trabajadoras mayores de 18 años tienen derechos específicos que facilitan su acceso a exámenes médicos preventivos. Las leyes N° 252 y N° 798 establecen que todas las mujeres empleadas en instituciones públicas o privadas cuentan con un día de tolerancia laboral con goce de haberes para realizarse mamografías y pruebas de Papanicolau. Estas normativas refuerzan el compromiso del Estado con la salud integral de las mujeres.
El cáncer de mama continúa siendo un desafío importante para la salud pública en Bolivia. Sin embargo, los avances logrados a través del SUS, junto con las políticas públicas que promueven la prevención y detección temprana, representan pasos significativos hacia una atención equitativa y eficaz. Es fundamental que las mujeres ejerzan sus derechos y aprovechen los servicios gratuitos disponibles para enfrentar esta enfermedad con mejores perspectivas. La lucha contra el cáncer de mama requiere un esfuerzo conjunto entre el Estado, las instituciones de salud y la sociedad civil para seguir salvando vidas y promoviendo una cultura de prevención.
