
Hay personas que aparentan menos edad. Foto: TikTok @escuelanegociocristiano / iStock
El tiempo pasa, pero no todos lo reflejan de la misma manera. Mientras algunos luchan contra el espejo con cirugías, inyecciones o cremas antiedad, otros irradian una vitalidad que parece desafiar el calendario. Para Adri Orosa, reconocido experto en negocios y mentor internacional, ese fenómeno tiene una explicación mucho más profunda de lo que se cree. “Aparentar menos edad no es un tema de buena genética; es un reflejo espiritual. Dice mucho más de ti de lo que imaginas”, asegura.
El empresario sostiene que la juventud no se mide en arrugas ni en canas, sino en la capacidad de mantener encendida la esencia interior incluso frente a las adversidades. “Cuando alguien luce más joven de lo que marca su edad, rara vez se trata de estética. Es porque su espíritu se mantuvo vivo, porque aprendió a renacer tras cada golpe. Eso no es bótox, eso es fuego interno. No es piel perfecta, es alma encendida. No es truco, es propósito”, afirma.
En un mundo obsesionado con la apariencia, Orosa lanza un mensaje disruptivo: el secreto no está en los tratamientos externos, sino en el cuidado del interior. Para él, lo que rejuvenece no son las inyecciones de colágeno, sino la fortaleza del espíritu y la conexión con Dios. “Tu luz no es para que cualquiera la robe; es para que la canalices con propósito. La Biblia lo dice claro: ‘No deis lo santo a los perros, ni echéis vuestras perlas delante de los cerdos’. La verdadera juventud no está en la piel, está en el alma. Tu edad la dice un papel; tu espíritu lo demuestra tu energía”, enfatiza.
El experto advierte además que esa vitalidad espiritual atrae tanto lo bueno como lo malo. “Los niños se acercan a ti, los animales confían porque perciben tu pureza. Pero esa misma luz también atrae a personas perdidas. Por eso es vital aprender a establecer límites”, explica.
@escuelanegociocristiano 243/365 📖 2 Corintios 4:16 – «Por tanto, no nos desanimamos. Al contrario, aunque por fuera nos vamos desgastando, por dentro nos renovamos día tras día.» La juventud que permanece no es genética ni estética: es fruto de un espíritu que se mantiene encendido. Cuando tu alma arde en propósito, tu vida refleja una fuerza que el tiempo no puede apagar. #jovenescristianos #contenidocristiano #reflexionescristianas #motivacioncristiana #emprendimientocristiano #emprendimiento #mentalidad
Tanto Adri Orosa como Maca Guzmán han consolidado su influencia en el mundo empresarial no solo por sus estrategias financieras, sino por fundamentar sus enseñanzas en la Biblia. Su mensaje desafía a quienes creen que el éxito y la plenitud están únicamente en los logros materiales o en la apariencia física. En un entorno que valora lo superficial, su propuesta resuena con fuerza: la juventud verdadera no se compra ni se finge; se cultiva en el alma y se refleja en la energía con la que enfrentamos la vida. Via el Tiempo.

