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Colombia avanza en la construcción de uno de los proyectos más determinantes para su futuro: el Plan Nacional Decenal de Educación 2026-2036, una hoja de ruta que definirá los rumbos de la enseñanza en la próxima década. En la Universidad Agustiniana de Bogotá se dieron cita rectores, académicos, asociaciones educativas, estudiantes, expertos y representantes del Gobierno Nacional en el foro “Los Planes Nacionales Decenales de Educación: Desafíos y Nuevos Retos”, un encuentro que se convirtió en espacio de debate y construcción colectiva con visión de país.
La jornada fue instalada por Julián Hincapié, rector de la Uniagustiniana; Andrés Vásquez, gerente general de FODESEP; Carlos Garzón, vicerrector académico de Uniempresarial y coordinador del Foro Permanente de Ciencia y Educación; y Francis Vargas, delegada del Ministerio de Educación Nacional. Todos coincidieron en un mismo punto: Colombia debe proyectarse como una nación que garantice el derecho a la educación con inclusión, equidad y pertinencia territorial, de manera que el sistema responda a la realidad de cada región.
El Ministerio de Educación, en su intervención, destacó que el IV Plan Decenal deberá girar en torno a tres ejes estratégicos: la garantía plena del derecho a la educación, el fortalecimiento de la financiación de la educación pública y la construcción de conocimiento público como motor de transformación social. Una ruta que implica no solo diseñar políticas, sino hacerlas efectivas frente a los retos que aún persisten y que, de no atenderse, perpetuarían brechas históricas en el acceso y la calidad.

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Este foro nacional se suma a los encuentros regionales y a los aportes recogidos en 20 municipios del país, donde más de 1.400 personas han participado en la construcción del Plan. Esa diversidad de voces ha permitido que el proyecto se convierta en un ejercicio democrático y plural, en el que confluyen desde las grandes universidades hasta las comunidades educativas locales.
El debate académico contó también con la participación de asociaciones como ASCUN, FODESEP, ACIET, ASENOF, ASIESCA y ADECOPRIA, que plantearon los retos que enfrentan las instituciones de educación superior en un país que reclama modernización, mayor cobertura y pertinencia en la formación de sus profesionales. Sus propuestas, lejos de ser diagnósticos aislados, se integran como insumos valiosos para un plan que busca ser el reflejo de las necesidades y aspiraciones de toda la sociedad colombiana.
Más allá de un documento de política pública, el Plan Nacional Decenal de Educación se perfila como un pacto social de largo aliento, en el que se juega no solo el futuro de las aulas, sino el destino mismo de una nación que reconoce en la educación la herramienta más poderosa para transformar su historia.
carloscastaneda@prensamercosur.org
