

COMPRENDIENDO LA ALTA SENSIBILIDAD.
¿Qué son las Personas Altamente Sensibles (PAS)?
El término PAS hace referencia a las Personas Altamente Sensibles, concepto introducido por la psicóloga Elaine Aron en los años noventa. Se trata de individuos con un sistema nervioso especialmente receptivo, lo que les hace percibir estímulos internos y externos con mayor intensidad. No es un trastorno ni una enfermedad, sino un rasgo de personalidad presente en un 15-20% de la población mundial.
Causas de la Alta Sensibilidad.
- Genéticas: predisposición hereditaria en la forma de procesar la información sensorial y emocional.
- Neurobiológicas: mayor activación en áreas cerebrales relacionadas con la empatía y la percepción.
- Ambientales: experiencias tempranas, vínculos afectivos y entornos emocionales influyen en su expresión.
Características de las Personas PAS.
- Reflexión y procesamiento profundo de la información.
- Empatía elevada y conexión emocional intensa.
- Reacciones emocionales intensas, tanto positivas como negativas.
- Sensibilidad a estímulos externos (ruidos, olores, luces, multitudes).
- Creatividad, intuición y gran atención a los detalles.
- Necesidad de espacios tranquilos para recargar energía.
Consecuencias de Ser PAS.
Positivas.
- Alta empatía y compasión.
- Talento artístico y creativo.
- Sensibilidad ética y espiritual.
- Capacidad de detectar detalles y matices.
Negativas (si no se gestionan bien).
- Estrés, ansiedad o depresión.
- Agotamiento emocional por sobreestimulación.
- Perfeccionismo y autocrítica
- Dificultad para sentirse comprendidos.
Medidas de Afrontamiento para las Personas PAS
- Autoconocimiento: reconocer su rasgo como una cualidad y no como un defecto.
- Gestión emocional: practicar técnicas de relajación (respiración, meditación, escritura terapéutica).
- Cuidado sensorial: evitar ambientes con exceso de ruido, luz o estímulos.
- Límites saludables: aprender a decir no sin culpa y priorizar el autocuidado.
- Rutinas restauradoras: integrar descansos, contacto con la naturaleza y actividades creativas.
- Red de apoyo: rodearse de personas que comprendan y respeten su sensibilidad.
- Terapia o acompañamiento profesional: trabajar la ansiedad, la autoestima y estrategias de regulación emocional.
Para Quienes Conviven con Personas PAS.
- Validar su sensibilidad: evitar frases como “eres demasiado exagerado” o “todo te afecta”, que descalifican.
- Escucha activa: prestar atención a lo que sienten sin minimizarlo.
- Ambientes seguros: procurar espacios de calma y respeto en casa o en el trabajo.
- Respetar sus tiempos: comprender que a veces necesitan retirarse para recargar energía.
- Comunicación clara y empática: expresar necesidades con amabilidad, sin gritos ni confrontaciones bruscas.
- Acompañar en la autorregulación: proponer paseos, música tranquila o prácticas que favorezcan la calma.
- Reconocer sus talentos: valorar su creatividad, intuición y capacidad de cuidado.
Las personas PAS son antenas emocionales y sensoriales que enriquecen el mundo con su sensibilidad. Su reto está en aprender a autorregularse y a poner límites; el reto de quienes conviven con ellas es brindar comprensión, respeto y un entorno seguro.
En un mundo acelerado, reconocer la importancia de la sensibilidad es una invitación a vivir con más humanidad, empatía y equilibrio.
Proverbios 4:23
«Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; porque de él mana la vida.»
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Dra. Elizabeth Rondón.
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