Temporada de ballenas en Uruguay: una gigante del sur pasó frente a la Laguna del Diario

Con la llegada del invierno, las costas uruguayas comienzan a recibir a sus visitantes más esperadas: las ballenas francas australes. Estos majestuosos cetáceos, que migran desde las frías aguas del sur hacia zonas más cálidas para reproducirse y socializar, ya se están dejando ver a lo largo del litoral atlántico del país. En los últimos días, se registró un avistamiento impresionante frente a la Laguna del Diario, en el departamento de Maldonado, donde una enorme ballena franca austral sorprendió a quienes se encontraban en la zona. El animal nadó muy cerca de la costa, brindando un espectáculo natural inigualable.

Un espectáculo que se repite cada año

La temporada de ballenas en Uruguay se extiende principalmente entre julio y octubre, y durante esos meses es posible verlas desde distintos puntos de la costa: Punta del Este, Piriápolis, José Ignacio, La Paloma y Cabo Polonio son algunos de los lugares favoritos para la observación desde tierra. La especie más frecuente es la ballena franca austral (Eubalaena australis), reconocible por su cuerpo oscuro, sus callosidades blancas en la cabeza y su característico soplido en forma de “V”. Se trata de una especie protegida a nivel nacional y declarada Monumento Natural desde 2002.

¿Por qué eligen Uruguay?

Las aguas tranquilas, poco profundas y libres de depredadores hacen de la costa uruguaya un lugar ideal para que estas ballenas descansen, interactúen y, en muchos casos, den a luz a sus crías. Aunque no es un sitio de alimentación, sí es una zona clave dentro de su ruta migratoria entre la Antártida y el sur de Brasil. El avistamiento frente a la Laguna del Diario recuerda la importancia de conservar estos espacios costeros y fomentar una observación responsable. Si bien no ingresó a la laguna, la cercanía a la orilla permitió disfrutar de su presencia sin interferir en su comportamiento natural.

Recomendaciones para observar ballenas

*No acercarse con embarcaciones a motor, ni seguirlas.

*Mantener silencio y distancia, para no alterar su conducta.

*Observar desde la costa, idealmente con binoculares o cámara con zoom.

*Reportar los avistamientos a organizaciones como OCC (Organización para la Conservación de Cetáceos) o a las autoridades ambientales.

Uruguay forma parte de una ruta migratoria única en el Atlántico Sur. La presencia de ballenas es un privilegio natural que, además de maravillar, nos invita a cuidar y respetar nuestro entorno. Estar atentos, disfrutar con respeto y compartir estos momentos ayuda a construir una cultura de convivencia con la naturaleza.

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