

Según excomandantes de la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas, el traslado de las comandancias de ambas instituciones a Guayaquil sí reducirán las muertes violentas.
Guayaquil es el nuevo centro administrativo, estratégico y operativo de la Policía Nacional y de las Fuerzas Armadas con el traslado de sus comandancias.
El presidente Daniel Noboa tomó la medida buscando una mayor coordinación para frenar el aumento de muertes violentas y de actividad delictiva en la Zona 8. Guayaquil, Durán y Samborondón, con 1 951 muertos, suman dos tercios de los asesinatos en el país.
«La Comandancia y la Presidencia han informado cuáles son las razones: mejorar las acciones antidelincuenciales en la Costa, planificación de estrategias y operaciones de seguridad y una respuesta más eficiente en Guayaquil. Eso es básicamente los parámetros que ha hecho que la comandancia se mueva temporalmente», dijo la vocera Carolina Jaramillo.
Dos excomandantes de la Policía y Fuerzas Armadas conversaron con Televistazo sobre este tema y apuntaron que el cambio de sede sí impacta en la disminución de las muertes violentas y dieron tres razones.
La primera es técnica: los comandantes conocen directamente los problemas de falta de recursos humanos y logísticos y ordenan de inmediato el traslado de personal.
La segunda es táctica. Con el traslado llevan equipos de inteligencia y de análisis de datos para enfocarse en las zonas consideradas calientes.
Y la tercera es anímica, al estar cerca físicamente de uniformados; desgastados por los constantes operativos.
La cuarta razón es política. Desde el Ministerio del Interior se dijo que expondrán a jueces y fiscales que liberen a sospechosos que, a pesar de las pruebas o de su peligrosidad, reciben medidas sustitutivas a la prisión preventiva.
«Si tuvieron la valentía de dejar en libertad a un delincuente, a un extorsionador, a un asesino, pues no le veo el inconveniente que den la cara y que diga quiénes son. Yo les voy a hacer ese favor», expresó.
El último cambio de las sedes del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas y de la Policía se dio el 3 de junio del 2024 a Manta. Sí se redujo el número de muertos, pero sigue siendo una de los cantones con más muertes violentas con 133 asesinatos en lo que va del año.
La táctica de estar presentes en los operativos, la ensayó el gobierno con ministros del Interior y de Defensa liderando operativos, pero no impactó en la disminución de las muertes violentas a largo plazo.
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