Uruguay se encamina hacia una zafra récord en soja

Valor Agrícola Uruguay- Gabriel Carballal, técnico agropecuario y productor agrícola, destacó en Valor Agregado de Radio Carve el gran rendimiento de la campaña de soja y las perspectivas para los cultivos invernales, con fuerte interés en carinata y canola.

La cosecha de soja avanza hacia su etapa final con resultados que sorprenden. Gabriel Carballal aseguró en entrevista con Valor Agregado de Radio Carve que el país está culminando una zafra “muy buena”, contrastando fuertemente con la campaña anterior.

“En la gran mayoría de los casos faltan cuatro o cinco días de cosecha, lluvia mediante, y se termina”, indicó. Gracias a condiciones climáticas favorables, se preservaron los suelos y se evitaron roturas innecesarias, lo que se traduce también en ahorros para los sistemas de producción. “Uruguay va a terminar con una campaña de soja récord, con toda seguridad”, afirmó.

Los rendimientos promedio que manejan muchos productores superan los 3.000 kilos por hectárea, e incluso hay casos por encima de los 3.500, algo que Carballal definió como “fuera de lo típico” en Uruguay. Una de las claves del salto productivo fue el rendimiento de la soja de segunda, que en muchos casos se acercó o igualó al de la soja de primera.

“Las segundas más tardías normalmente rinden menos de 2.000 kilos. Este año, con un clima casi perfecto, rindieron casi igual que las de primera. Eso empujó el promedio nacional a niveles récord”, explicó.

A pesar del gran volumen de producción, el panorama económico de la campaña no es del todo favorable por los bajos precios internacionales. “Con estos precios tan menguados (alrededor de US$ 350 por tonelada) por suerte estamos logrando algo de rentabilidad, eso le levanta el ánimo al productor”, señaló Carballal.

Con la buena zafra de verano casi cerrada, la mirada está puesta en los cultivos de invierno. Según Carballal, hay una “intención de siembra importante” y agregó que “la carinata es el cultivo más atractivo hoy, seguida por la canola. Después vienen bastante atrás el trigo y la cebada”. Las razones están en los precios: los cultivos oleaginosos se ven favorecidos por la demanda de aceites vegetales y sus derivados.

Sin embargo, Carballal advirtió sobre algunas limitantes: el exceso de lluvias podría retrasar siembras clave, y los productores deben respetar rotaciones para evitar problemas sanitarios. También alertó que, con los actuales costos, “no estamos en una situación laxa” y que lograr buenos márgenes implica alcanzar rendimientos exigentes. En su empresa, por ejemplo, “para empatar en trigo necesito sacar 4.600 o 4.700 kilos por hectárea. Es dificilísimo”.

Aun así, subrayó que diversificar sigue siendo fundamental: “Acá en Uruguay no podemos jugar todas las fichas a un solo cultivo. Es muy peligroso”.