Imagen Filbo 2025 – Prensa Corferia
Bogotá se prepara para latir al ritmo de los libros. Desde el 25 de abril y durante 17 días, la Feria Internacional del Libro de Bogotá (FILBo) no solo abrirá sus puertas, sino que abrirá el cuerpo y la memoria de una nación entera a través de la literatura. Más de 600.000 visitantes, 500 autores de 35 países, y un entramado de más de 2.300 actividades harán de esta edición 2025 un acontecimiento que trasciende el calendario cultural: será una experiencia colectiva de pensamiento, diversidad y encuentro.
La palabra será protagonista, sí, pero no vendrá sola. Bajo el lema Las palabras del cuerpo, la FILBo se propone explorar las narrativas que habitan en la piel, en la música, en los desplazamientos, en los silencios de la historia y en las voces que aún resisten. Se hablará con los labios, con los dedos, con los pies, con la memoria.
España será el país invitado de honor y su presencia no pasará desapercibida. Bajo el lema Una cultura para la paz, con los otros y con el planeta, llegará con una delegación que no solo celebrará la lengua compartida, sino también la riqueza de sus otras lenguas: catalán, gallego, euskera y asturiano. Más de 130 autores —entre ellos Javier Cercas, Rosa Montero, Luis García Montero y Marina Garcés— cruzarán el Atlántico con un mensaje claro: la literatura es una herramienta para la memoria, el diálogo y la reconciliación. “Es una oportunidad para proyectar internacionalmente una cultura plural, diversa, crítica, y para tejer puentes profundos con Colombia desde la palabra”, señaló Jordi Martí Grau, secretario de Estado de Cultura del Gobierno de España. La propuesta española rendirá homenaje a las bibliotecas rurales ambulantes, esos vehículos de papel y sueños que han sembrado esperanza en los rincones más olvidados de ambos países.
Pero la FILBo 2025 no será solo un cruce de orillas transatlánticas. La feria será también un espejo donde Colombia se mire, reconozca y celebre a sí misma. La Guajira, tierra de vientos míticos y voces ancestrales, tendrá su lugar en el corazón del recinto ferial. Con más de 30 invitados, el pabellón guajiro evocará su riqueza cultural con literatura, música, danza y teatro, y con la iniciativa Sol de Letras, que exalta a nuevos y consagrados autores del Caribe colombiano. Será un homenaje vivo a sus 60 años de historia.
Imagen Filbo 2025 – Prensa Corferia
Bogotá, ciudad anfitriona, también se convertirá en protagonista gracias al Pabellón LEO: una apuesta multisensorial para sentir la literatura desde los sentidos. Habrá literatura en braille, lenguaje de señas, talleres creativos, y un circuito de lecturas por toda la ciudad. Más de 8.000 estudiantes de colegios públicos participarán gracias al programa FILBo en tu colegio, confirmando que la educación no se da solo en las aulas, sino también en el contacto directo con la cultura.
La Feria, además, celebrará la segunda entrega de la Biblioteca de Escritoras Colombianas. Noventa y siete autoras reunidas en diez antologías que recorren la historia del país desde la voz femenina. Esta colección, liderada por el Ministerio de las Culturas y la Biblioteca Nacional, llega a más de 1.500 bibliotecas públicas con la fuerza de lo necesario: reescribir el relato nacional desde las voces que durante siglos no fueron escuchadas.
También se darán cita grandes figuras de la literatura mundial como Andrés Neuman, McKenzie Wark, Yásnaya Aguilar, Virgie Tovar, José Luis Peixoto, Un-su Kim y Mario Alonso Puig, junto a referentes colombianos como Héctor Abad Faciolince, Laura Restrepo, Pilar Quintana, Juan Gabriel Vásquez, Margarita García Robayo y Carolina Sanín.
La FILBo no se queda en los libros. Tiene cuerpo, tiene rostro, y tiene alma. Hay programación infantil y juvenil, homenajes a figuras clave como Darío Jaramillo Agudelo, Miguel Torres e Irene Vasco; hay ferias regionales en Medellín, Cali, Sincelejo; hay un Salón Internacional de Negocios, un programa de becarios editoriales de todo el mundo, encuentros con traductores, bibliotecarios, libreros, y emprendedores del sector.
Todo esto es posible gracias a una alianza poderosa entre entidades públicas y privadas que creen en el poder transformador de la lectura. Desde el Ministerio de las Culturas hasta la Alcaldía de Bogotá, pasando por la Cámara Colombiana del Libro, Visa, Ecopetrol, ONU Mujeres, y la Fundación Saldarriaga Concha. Y gracias, sobre todo, a los lectores. Porque sin ellos, la Feria no sería lo que es: una celebración del pensamiento, una danza de palabras, un acto de resistencia contra el olvido.
FILBo 2025 será un viaje que empieza en el cuerpo y termina en el alma. Y todos están invitados.
carloscastaneda@prensamercosur.org
