

El orden internacional basado en normas, que durante décadas ha sustentado el comercio y las relaciones multilaterales, enfrenta una crisis sin precedentes. La disrupción de líderes como Donald Trump ha desafiado los fundamentos del derecho internacional y ha abierto la puerta a un sistema regido por el poder, donde las normas parecen ceder ante los intereses unilaterales. En este contexto, América Latina, y particularmente Uruguay, se encuentran en una encrucijada estratégica. Así lo plantea Guillermo Valles, embajador uruguayo en Brasil, quien analiza los desafíos y oportunidades que surgen en este nuevo escenario global.
El Contexto Global: Un Orden en Cuestionamiento
El multilateralismo, que ha sido la piedra angular de la gobernanza global desde el fin de la Segunda Guerra Mundial, está siendo erosionado. Según Valles, el mundo enfrenta un cambio paradigmático que no solo afecta al sistema de comercio internacional, sino también a los principios básicos del derecho internacional. «Estamos viendo un retroceso hacia un sistema pre-1947, donde predominaban las relaciones bilaterales y las asimetrías de poder eran más evidentes», advierte.
La disrupción generada por Trump no se limita al ámbito comercial; su impacto se extiende a la legitimidad de las instituciones internacionales y al cuestionamiento de normas fundamentales. Esto plantea riesgos significativos para países pequeños como Uruguay, que dependen de un sistema basado en reglas para garantizar su participación equitativa en el escenario global.
Brasil: Entre la Cautela y el Liderazgo Regional
En este complejo panorama, Brasil emerge como un actor clave. Con un crecimiento económico del 3,5% en 2023 y reformas estructurales significativas como la tributaria, el gigante sudamericano busca consolidar su posición tanto a nivel regional como global. Sin embargo, enfrenta desafíos políticos internos marcados por la polarización y las denuncias contra el expresidente Jair Bolsonaro por un supuesto intento de golpe de Estado.
La actitud de Brasil frente a la disrupción global ha sido cautelosa. Aunque ha criticado algunas políticas de Trump, no ha adoptado una postura abiertamente confrontativa. Este año, Brasil asume dos presidencias internacionales de gran relevancia: la de los BRICS y la COP30. Ambos roles representan oportunidades para fortalecer su liderazgo, pero también desafíos ante un escenario global incierto.
El Acuerdo UE-Mercosur: Una Red de Contención Estratégica
En medio de esta incertidumbre, el acuerdo entre la Unión Europea (UE) y el Mercosur adquiere una relevancia estratégica. Para Valles, este acuerdo no solo representa una oportunidad económica, sino también una herramienta para reforzar el multilateralismo y las normas internacionales. «Es una red de contención que trasciende lo bilateral. Aunque no resolverá todos los problemas, es un paso importante para mantener instituciones y acuerdos que promuevan un orden económico internacional basado en reglas», señala.
Además, el acuerdo cobra importancia en un contexto donde Europa busca redefinir su rol global frente al avance de potencias como Estados Unidos y China. Según Valles, la pérdida de centralidad política de Europa en conflictos como el de Ucrania demuestra la necesidad de alianzas estratégicas que fortalezcan su posición en el escenario internacional.
Uruguay: Pequeño pero Estratégico
A pesar de su tamaño, Uruguay tiene un papel crucial que desempeñar en este nuevo escenario. Su estabilidad política, su compromiso con el multilateralismo y su capacidad para generar consensos lo posicionan como un actor relevante en la región. «Uruguay nació como resultado de un acto internacional, y su historia está intrínsecamente ligada a la vida internacional», subraya Valles.
El embajador destaca la importancia de mantener una política exterior activa y diversificada. En este sentido, el gobierno entrante tiene la oportunidad de utilizar eventos clave, como la transición democrática del 1º de marzo, para promover diálogos sobre los desafíos globales y regionales. «Es fundamental que Uruguay siga siendo un país internacionalizado, defendiendo sus intereses a través del multilateralismo y las alianzas estratégicas», afirma.
Relaciones Bilaterales con Brasil: Una Agenda Prometedora
En cuanto a las relaciones bilaterales con Brasil, Valles destaca avances significativos durante la administración de Luis Lacalle Pou. Desde la declaración del Aeropuerto de Rivera como binacional hasta la construcción del segundo puente sobre el río Yaguarón, los proyectos conjuntos reflejan una relación sólida basada en objetivos comunes.
Además, iniciativas como el relanzamiento de la navegación en la laguna Merín y la explotación de minas en Mato Grosso del Sur demuestran el potencial económico de una mayor integración
