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La vicepresidenta y ministra de Igualdad y Equidad, Francia Elena Márquez Mina, reafirmó su compromiso con la paz y el desarrollo sostenible durante la clausura del proyecto «Apoyo a las Iniciativas Productivas para la Generación de Ingreso de las Mujeres Negras Nortecaucanas». El acto, realizado este jueves en Santander de Quilichao, contó con la participación del director del Departamento de Prosperidad Social, Gustavo Bolívar, y reunió a cerca de 500 mujeres afrodescendientes beneficiarias.
“Con mis apellidos Márquez y Mina, sigo aquí comprometida con este país, con este territorio, con ustedes las mujeres del Cauca, con las mujeres de Colombia y con la paz”, declaró la alta mandataria, destacando la relevancia del proyecto, que representa una inversión de $5.800 millones por parte de Prosperidad Social.
El proyecto se enmarca en el cumplimiento de los acuerdos pactados con el Estado en 2014, tras la «Movilización de Mujeres Negras por el Cuidado de la Vida y los Territorios Ancestrales». Esta marcha, protagonizada por mujeres afrocolombianas del norte del Cauca, denunció las amenazas de grupos armados y la devastación provocada por la minería ilegal en sus comunidades.
“Estamos fomentando economías para la paz, economías legales que contribuyen al bienestar de nuestras comunidades. Sabemos que la economía impulsada por las mujeres es realmente la economía para la paz y para la vida”, enfatizó Márquez Mina.
El programa ha beneficiado a 900 familias vulnerables de diez municipios del norte del Cauca: Buenos Aires, Corinto, Caloto, Guachené, Puerto Tejada, Miranda, Padilla, Villa Rica, Santander de Quilichao y Suárez. Se apoyaron 465 iniciativas individuales en comercio y servicios (192), agropecuaria (227) e industria y manufactura (46), además de 35 unidades productivas asociativas o colectivas. Del total, 256 unidades fueron nuevas y 244 fortalecidas.
“Este no es un regalo, es una obligación del Estado. Estamos sembrando la semilla de la esperanza y las oportunidades en una región golpeada por el conflicto armado. Si hubiera más oportunidades, menos gente acudiría a la violencia y a las economías ilícitas”, subrayó la vicepresidenta.
El proceso incluyó talleres de capacitación en manejo de contabilidad, proyección de negocios, crianza de animales, finanzas e inventarios. Sin embargo, Márquez Mina reconoció que estos esfuerzos son insuficientes sin infraestructura básica como agua potable, saneamiento y vías de acceso, retos que el Gobierno Nacional busca resolver para cerrar las brechas estructurales de inequidad y desigualdad.
“Espero que mañana ustedes se conviertan en grandes empresarias. Verraquera, entusiasmo, solidaridad, articulación y compromiso es lo que necesitamos para sacar nuestro departamento y nuestro país adelante”, alentó la vicepresidenta, quien recordó sus raíces como activista y defensora de derechos humanos.
“Comportarme como vicepresidenta es ser rebelde, levantar la voz y hablarle con honestidad a mi país. La paz pasa por silenciar las armas y cerrar las brechas de inequidad y desigualdad histórica a las que este pueblo maravilloso ha estado sometido”, concluyó Márquez Mina, dejando claro que su compromiso con el Cauca y Colombia sigue firme.
carloscastaneda@prensamercosur.org
