

La sentenciada por el homicidio de Marcelo Pecci asegura que el entonces fiscal de la causa le pidió declararse culpable y confirmar la versión de Francisco Correa Galeano, pese a que ella no tenía información al respecto.
Margareht Lizeth Chacón, sentenciada por homicidio agravado en el magnicidio de Marcelo Pecci, habló con el medio Focus Noticias sobre su situación procesal y los detalles de la investigación.
“A Andrés (Pérez Hoyos) nunca lo escucharon, las palabras del doctor Burgos siempre fueron, declárese culpable y que Paraguay se encargue de su muerte”, contó la sentenciada.
Cuando a ella le tocó hablar con el fiscal Mario Burgos, actualmente apartado de la pesquisa por la decisión de la Fiscalía General de Colombia, Chacón dice haber recibido una indicación específica.
“Cuando tengo la reunión con el doctor Burgos él a mí me dice que yo tengo que decir y corroborar lo que un testigo dice de mí y del expresidente del Paraguay. Entonces dije, yo no puedo mencionar, hablar o decir algo que a mí no me consta, que yo nunca escuché”, reveló.
Chacón se dirigió a Paraguay y pidió a la Fiscalía visitar en la cárcel a Andrés Pérez Hoyos para que él cuente su verdad y que la muerte de Marcelo Pecci no quede impune.
El Tribunal Superior de Cartagena confirmó la condena a Margareht Chacón por homicidio agravado, pero la absolvió de los hechos de fabricación, tráfico y porte de armas. Con esto, en lugar de 39 años de cárcel, cumplirá 35 años tras las rejas.
La justicia colombiana concluyó que Chacón tuvo una intervención crucial en el asesinato de Pecci, pese a que no fue una de las cabezas visibles. Esta mujer prestó su camioneta para movilizar a los asesinos y también les entregó el dinero a los autores.
“La Sala considera que la acusada intervino en el homicidio como coautora, porque realizó contribuciones tanto en la fase preparatoria como ejecutiva del iter criminis, y dado que, las ayudas que prestó tienen la trascendencia definitiva se le atribuyó la acusación”, expresa la conclusión.
Sin embargo, los jueces no encontraron pruebas que apunten a que este despreciable hecho por el que se cobró un millonario monto haya tenido algún lucro o beneficio directo para Chacón, ya que fue Ramón Pérez Hoyos el contacto principal con el articulador.
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