Lapidario informe del Departamento de Estado habla de obstáculos para el clima de inversiones y de negocios, con debilidad en controles, poca seguridad jurídica y altos funcionarios corruptos.
La impunidad y la corrupción desenfrenadas siguen obstaculizando la economía de Paraguay, que se sitúa en la mitad o por debajo de la media en la mayoría de los indicadores de competitividad, de acuerdo con un lapidario informe del Departamento de Estado de los Estados Unidos, emitido el 10 de julio pasado y que se dio a conocer ayer.
Bajo el título “Declaraciones sobre el clima de inversión 2024: Paraguay”, el Departamento de Estado detalla el accionar gubernamental en varias esferas de la economía local, y puntualiza sus objeciones en torno a lo que interpreta como un escenario de inseguridad judicial.
Este flagelo –a criterio del Departamento de Estado– obstaculiza el clima de inversión, mientras que la infracción de marcas y la falsificación son moneda corriente; y la corrupción rampante y la impunidad de los funcionarios públicos socavan la confianza en el Estado de Derecho, tal como se lee en sus trece ítems bien detallados.
“Varias empresas estadounidenses siguen teniendo problemas para trabajar con las oficinas gubernamentales para resolver las disputas sobre inversiones, incluida la falta de voluntad del Gobierno para pagar las deudas contraídas”, especifica el reporte que surge de informes de organismos nacionales como internacionales y que la administración del presidente Joe Biden expone como corolario de su gestión, ya próxima a ser reemplazada por Donald Trump.
En torno a los organismos reguladores, el Departamento de Estado señala que las funciones de supervisión de aquéllos en materia de telecomunicaciones, energía, agua potable y medio ambiente son ineficientes y opacas; en tanto que los cambios en la dirección de los organismos reguladores por motivos políticos afectan negativamente a las empresas y a los inversores.
“Paraguay se encuentra en la Lista de Vigilancia del Informe Especial 301 del Representante Comercial de los Estados Unidos (USTR) desde 2019, en parte debido a los compromisos incumplidos de Paraguay en materia de derechos de propiedad intelectual entre los Estados Unidos y Paraguay”, refiere el documento.
También se hace referencia a la legislación paraguaya, que prevé sanciones penales para la corrupción oficial; sin embargo, acota que la impunidad impide su aplicación efectiva. Históricamente y en la actualidad, funcionarios de todas las ramas y niveles del Gobierno participan en prácticas corruptas, de acuerdo con el informe.
Además, la Contraloría General de la República estima que el 90 por ciento de las instituciones públicas tienen deficiencias en sus sistemas de supervisión. La inseguridad judicial y la corrupción perjudican el clima de inversión en Paraguay, añade.
Ciudad del Este fue incluida en el Informe de la Oficina de Comercio de Estados Unidos sobre los mercados notorios de falsificación y piratería durante más de 20 años. Este hecho fue expuesto en el reporte del Departamento de Estado. “El cruce fronterizo de Ciudad del Este y la ciudad misma sirven como centro de distribución de productos falsificados y pirateados en la región de la triple frontera entre Brasil, Argentina y Paraguay y más allá. La informalidad y la porosidad de la frontera en la zona siguen siendo un desafío”, se afirma. Siguen existiendo –a criterio del informe oficial de Estados Unidos- preocupaciones sobre la protección inadecuada contra el uso comercial injusto de datos de prueba o de otro tipo.
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