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Vie. Nov 15th, 2024
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Hoy en día, el cine de terror nos ofrece una amplia gama de historias espeluznantes que nos mantienen al borde de nuestros asientos. Sin embargo, ¿por qué buscar el miedo en la ficción cuando la realidad puede ser aún más aterradora? Aquí te presentamos algunas historias reales que harán que te replantees tu amor por las películas de terror.

#7 El hombre que intentó salvar a Lincoln

Todos conocemos la trágica historia del asesinato de Abraham Lincoln, pero pocos saben sobre el hombre que intentó salvarlo. Henry Rathbone estaba presente durante el ataque al presidente de los Estados Unidos y, a pesar de sus esfuerzos, no logró evitar la tragedia. Este evento marcó su vida de manera irreversible. Rathbone nunca se recuperó mentalmente y, 18 años después, intentó matar a sus tres hijos. Su esposa trató de detenerlo y resultó apuñalada. Posteriormente, él intentó suicidarse. Durante su tiempo en un asilo, afirmaba constantemente que había personas escondidas en los cuadros, convencido de que alguien tras las paredes quería envenenarlo.

#6 Zombis con sífilis en las calles italianas

En 1494, Italia se vio afectada por una enorme epidemia de sífilis en una época en la que no se conocía la cura para la enfermedad. Las personas afectadas por esta enfermedad tenían la piel suelta en el rostro, así como en los genitales y extremidades, lo que les confería una apariencia similar a la de los zombis en las películas. La enfermedad causaba la muerte en cuestión de meses, dejando la piel completamente destruida.

#5 Infierno en Herculano

Cuando pensamos en el Vesubio, automáticamente recordamos la ciudad de Pompeya, completamente cubierta por cenizas después de la erupción volcánica. Sin embargo, Herculano, una ciudad más pequeña y cercana al volcán que Pompeya, sufrió consecuencias aún más devastadoras. Se dice que algunos cráneos estallaron debido al intenso calor concentrado durante la erupción. Estar en ese lugar en ese momento era como estar en el infierno mismo.

#4 Primer asesino en serie

El primer registro de un asesino en serie se encontró en Roma durante el siglo I. Locusta despertó gran temor en un período considerado “pacífico” en la capital italiana. Fue arrestada y condenada por envenenamiento, pero fue perdonada por Agripina por haberla ayudado a asesinar al emperador Claudio. Posteriormente, Nero también recompensó a Locusta por un “favor” otorgándole un lugar para convertirse en profesora y enseñar artes. Sin embargo, su suerte cambió con el emperador Galba, quien finalmente la ejecutó en público.

#3 El muñeco asesino existió

La película “Child’s Play” cuenta la historia del aterrador muñeco Chucky, poseído por un espíritu maligno. Esta historia está basada en la historia real de Robert, un muñeco del tamaño de una persona que pertenecía al pequeño Gene Otto. Aparentemente, un sirviente enfadado con la familia colocó un hechizo en el muñeco, y el niño afirmaba hablar con él mientras el muñeco, sorprendentemente, respondía. Después de la muerte de Gene, Robert pasó de mano en mano y actualmente se encuentra encerrado en un museo donde, según dicen, suceden cosas extrañas.

#2 La canción mortal

En la década de 1930, la canción “Gloomy Sunday” se volvió muy popular, pero con el tiempo adquirió la reputación de ser una “canción mortal” cuando se descubrió que más de 18 personas se suicidaron en Budapest después de escucharla. Aunque Hungría siempre ha tenido altas tasas de suicidio, muchos consideraron que esto era simplemente una desafortunada coincidencia. Sin embargo, la muerte del compositor de la canción, quien se suicidó al descubrir que su única obra maestra había causado tantas desgracias, fue crucial para que su reputación como “canción mortal” perdurara.

#1 Alpinistas desaparecidos

En 1959, un grupo de amigos se reunió para hacer alpinismo en Rusia y montaron campamentos. Poco después, los alpinistas desaparecieron y dejaron sus tiendas vacías. Cuando fueron encontrados, estaban con pocas ropas, muchas heridas internas y sus cuerpos presentaban una extraña pigmentación anaranjada. No hubo signos de lucha, aunque algunos de ellos tenían fracturas en el cráneo, les faltaba la lengua y los ojos. Hasta el día de hoy no se sabe qué les sucedió. El veredicto final fue que murieron de “causas naturales convincentes”, pero resulta difícil imaginar que un grupo sufriera un final tan brutal sin explicación alguna.

Estas historias nos recuerdan que la realidad puede ser mucho más aterradora que cualquier película de terror. A veces, la verdad supera con creces la ficción y nos enfrenta a los verdaderos horrores del mundo. Así que la próxima vez que decidas ver una película de miedo, recuerda que lo que realmente debería asustarte es lo que sucede en la vida real.

Redacción Central
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