Batalla de Piribebuy, la heroica resistencia que marcó la historia del Paraguay

Asunción, Agencia IP.- El 12 de agosto de 1869, en el contexto de la Guerra de la Triple Alianza, se libró una de las batallas más emblemáticas y trágicas de la historia de Paraguay: la Batalla de Piribebuy. Este enfrentamiento, parte de la campaña de las cordilleras, se ha convertido en un símbolo de resistencia y sacrificio para el pueblo paraguayo, particularmente para la ciudad de Piribebuy, que hoy en día conmemora esta fecha como uno de sus días patrios.

En conversación con el historiador Claudio Velázquez, se destaca la importancia de esta batalla, no solo por el valor demostrado por los defensores paraguayos, sino también por las consecuencias devastadoras que sufrió la ciudad y sus habitantes. «Piribebuy es considerada la ciudad heroica precisamente por esta batalla. A pesar de estar en una situación desesperada, con solo 5.000 efectivos paraguayos enfrentando a un ejército aliado de 20.000 hombres, la resistencia fue feroz», señala Velázquez.

La batalla, que se libró en pleno casco urbano de la ciudad, es una de las pocas batallas urbanas de la Guerra de la Triple Alianza, junto con la de Pilar, aunque esta última de menor envergadura. El enfrentamiento en Piribebuy fue particularmente brutal, no solo por el intenso bombardeo que precedió el asalto, sino por la encarnizada lucha que se dio dentro de la ciudad misma. «Lo interesante es que el casco urbano de Piribebuy tiene una relevancia histórica enorme, ya que en torno a el se desarrolló la batalla. La iglesia de Piribebuy, en particular, es un símbolo histórico, pues fue el escenario de parte de la resistencia y refugio para los sobrevivientes», comenta Velázquez.

Uno de los episodios más trágicos de esta batalla fue la masacre posterior a la rendición de las fuerzas paraguayas. Según Velázquez, «la resistencia en Piribebuy fue tan tenaz que las tropas aliadas se ensañaron con los sobrevivientes. Hubo matanzas innecesarias, y uno de los episodios más oscuros fue el incendio del hospital de sangre, donde todos los heridos que estaban allí fueron quemados vivos. Algunas fuentes indican que este incendio fue provocado intencionalmente por las fuerzas aliadas».

En la batalla se destacó la figura del capitán Pedro Pablo Caballero, quien dirigió la defensa paraguaya con valentía y que, tras la derrota, fue capturado y brutalmente asesinado. «Hay muchas versiones sobre cómo fue ultimado, pero la mayoría apunta a que fue torturado antes de ser asesinado. Su trágico final es otro de los elementos que le otorgan a la Batalla de Piribebuy un lugar destacado en la memoria histórica del Paraguay», añade Velázquez.

Hoy en día, la ciudad de Piribebuy rinde homenaje a los héroes de esta batalla con desfiles y conmemoraciones, recordando el sacrificio de aquellos que, con pocos recursos y enfrentando una fuerza abrumadora, lucharon con valor por su patria. Si bien la Batalla de Piribebuy es una página de dolor en la historia paraguaya, también es un testimonio del espíritu indomable de su pueblo.