“En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios” (Juan 1.1).
Como podemos percibir, Dios y la Palabra son uno. La comunicación es parte de la esencia de Dios. Dios es un comunicador por excelencia.
A través de Jesucristo, podemos dirigirnos a Dios. El canal de comunicación está restaurado, la pared de separación entre nosotros y Dios está destruida. Jesús es el medio (el medio de comunicación, el canal, el vehículo) por el cual nos podemos comunicar con el Padre.
Dios no es mudo. No ha permanecido callado, encerrado en su misma eternidad. Dios se ha comunicado con nosotros. Ha querido hablarnos, contarnos de su amor, explicarnos sus planes. Jesús es la Palabra, es Dios, comunicándose con los seres humanos.
La Palabra de Dios la puede entender todo el que escucha. Pero Dios no solo ha querido hablar. Él vino a vivir entre nosotros.
En el libro de Juan, se nos presenta a Jesús contando cómo es Dios: Es Palabra, es Luz, es Agua, es Pan y Vino nuevo, es Alegría, es Amor, es Perdón, es Bueno, es Amigo, es Maestro, es la Puerta, es Pastor, es Esperanza, es el Camino, es Verdad, es Paz, es Novedad, es Aliento, es Resurrección, es Vida.
Resalta: “Mis ovejas escuchan mi voz… y me siguen”.
Necesitamos escuchar su voz y seguir sus pasos. No basta con oír su voz. Es necesario seguir sus pasos.
Jesús dialoga con Nicodemo, con la Samaritana, con grupos de personas. Se registran en Juan varios discursos de Jesús.
Afirma “Todo lo que he oído a mi Padre os lo he dado a conocer” (15.12-15)
El mensaje clave que podemos oír:
“Porque tanto amó Dios al mundo que dio a su Hijo unigénito, para que todo el que cree en él no se pierda, sino que tenga vida eterna. Dios no envió a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para salvarlo por medio de él. El que cree en él no es condenado, pero el que no cree ya está condenado por no haber creído en el nombre del Hijo unigénito de Dios”. (3. 16-18).
Juan, no podía escribir todos los hechos de Jesús, pero todo lo que se escribió es suficiente para que nosotros creamos que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios, y que tengamos vida en Él. Nuestro testimonio en la actualidad puede no ser absolutamente completo, pero si comunicamos a otros, este contenido debiera ser comprensible y relevante.
En Juan, Jesús es el Salvador que comunica y cumple las esperanzas de salvación de todo ser humano que pone su confianza en él.
Red BUENAS NOTICIAS ILIMITADAS
- La Cumbre Iberoamericana revela profundas divisiones regionales - 20 de noviembre de 2024
- Latinoamérica puede sacar partido de la guerra comercial entre Trump y China - 20 de noviembre de 2024
- El Foro Latibex 2024 resalta el papel de la Bolsa para canalizar las inversiones de Latinoamérica en España - 20 de noviembre de 2024