Suben hasta un 50% los precios de productos argentinos en poblaciones fronterizas

En las ciudades fronterizas de Argentina se encarecieron los productos alimenticios como consecuencia del tipo de cambio y las recientes medidas del gobierno de Javier Milei. La internación de mercadería al país se redujo considerablemente por las alzas entre un 20% en la frontera Villazón – La Quiaca y 50% en Yacuiba – Salvador Mazza.

El efecto también se sintió en el paso fronterizo entre Bermejo – Aguas Blancas. Por ahora la actividad comercial en las ciudades fronterizas de Bolivia con el país vecino están casi paralizadas.

El secretario ejecutivo de la Federación de Trabajadores Gremiales de Villazón, Wilson Gutiérrez, dijo a EL DEBER que tras las medidas dictadas por el gobierno argentino, se incrementaron en un 20% los productos comestibles, como harina, arroz y aceite.

“Personalmente averigüé en La Quiaca, subieron los productos de la canasta familiar en su mayoría e incluso los mayoristas empezaron a ocultar los alimentos hasta que se estabilice la situación económica en Argentina”, afirmó.

Según Gutiérrez, en el lado argentino predomina la incertidumbre después de las medidas económicas que lanzó el gobierno argentino.

La secretaria ejecutiva de la Federación de Trabajadores Gremiales de Bermejo, Narda Luna, aseveró que las subas de los productos comestibles se produjeron una semana antes de la posesión del presidente Javier Milei.

Por ejemplo, una bolsa de arroz argentino de 10 kilogramos se vendía hasta Bs 50 (unos 6.000 pesos argentinos) y ahora tiene un precio de Bs 90 (11.000 pesos argentinos) aproximadamente.

La dirigente indicó que ahora se teme un incremento considerable con las primeras medidas que se anunciaron ayer. “Poca gente boliviana va a Aguas Blancas porque sabe que hubo una suba de precios de los productos y no sabemos cómo será el comportamiento comercial con las nuevas medidas”, expresó Luna.

La situación es similar en el paso fronterizo entre Yacuiba y Salvador Mazza debido a que se reportó un aumento del 50% en los productos comestibles al por menor.

El periodista del medio digital Infopocitos, Raúl Alberto Costes, reafirmó que en ese porcentaje se incrementaron la mayor parte de los alimentos y desde el lunes se paralizó la actividad comercial.

“Está paralizado la venta al por mayor a los comerciantes bolivianos, ya que los comerciantes argentinos están esperando de sus proveedores en cuánto se va incrementar más, pero hay mercadería”, mencionó.

Desde hace dos días atrás disminuyó la actividad comercial fronteriza entre Yacuiba y Salvador Mazza, lo significa que los comerciantes o clientes bolivianos retornan al país sin poder comprar.

Costes sostiene que la situación económica en las ciudades fronterizas se complicó con el alza de la nafta (gasolina) y el gasoil (diésel). “El litro de nafta súper cuesta cerca de 600 pesos argentinos que equivale a $us 0,75 al nuevo tipo de cambio oficial de 800 pesos argentinos. En el año los precios de los combustibles aumentaron 232%”, indicó.

Por otro lado, los dirigentes gremiales bolivianos coincidieron que se redujo el contrabando de productos argentinos hacia el mercado del país.

Gutiérrez puntualizó que ya no es rentable por los altos precios de la mercadería argentina y si persiste la suba podría mermar considerablemente.

A su vez, Luna estimó que la ilícita actividad en Bermejo se redujo en un 30 % a 40%.

El economista y docente, Víctor Hugo Figueroa, había anticipado a fines de noviembre que la estanflación y las medidas del gobierno de Argentina causarían la disminución del contrabando hacia Bolivia por los precios altos de las mercaderías argentinas.

Para el presidente de la Confederación Nacional de Agricultura de Bolivia (Confeagro), José Luis Farah, el sector estará atentó a cómo se desarrollan las medidas de “emergencia” del gobierno de Javier Milei.

“No hay medidas tan de shock, pero sí para estabilizar el dólar y veremos cómo impacta en la economía boliviana y el camino que toman nuestras autoridades”, declaró Farah.


PUNTO DE VISTA

Daniel Montamat, economista y analista argentino

“El gobierno de Javier Milei lanzó medidas recesivas que tienen como objetivo recuperar el equilibrio de las cuentas públicas y externas para desacelerar el proceso inflacionario. Si logran su efecto aumentarán las exportaciones y se reducirán algunas importaciones.

Creo que ese es el reacomodo más importante en relación con los socios comerciales del país como Bolivia. También puede afectar un tiempo la remisión de divisas de residentes bolivianos a sus familiares, pero si baja la inflación, se recupera la estabilidad y esto va a cambiar porque empezarán a mejorar los salarios argentinos que están muy deprimidos en dólares.

Son medidas necesarias, vamos a ver si son suficientes. Está pendiente el paquete de reformas estructurales”.