Penadés había organizado un cuadro de fútbol de niños: un joven dice que abusó de él siendo menor

Uno de los denunciantes del exsenador nacionalista, Gustavo Penadés, asegura que fue abusado por él cuando tenía 9 años, al menos en tres ocasiones, en el contexto de un cuadro de fútbol infantil organizado por el ahora acusado.

El joven denunciante, identificado como “F” en la causa, tenía 9 años de edad al momento en que habrían ocurrido los abusos. “En ese entonces, Penadés había organizado un cuadro de fútbol con niños de un barrio, había comprado camisetas y hacían partidos”, dice el texto del caso, según información vertida por varios medios.

En algunas ocasiones, narró el denunciante ahora adolescente, Penadés lo llevaba aún siendo niño a un cuarto en donde ocurrían los presuntos abusos sexuales. “Estaba con otro amigo jugando a la pelota próximo al Shopping Nuevo Centro, él tenía 17 y su amigo 16 años, se arrimó un hombre bien vestido, y nos dijo si queríamos jugar un campeonato de fútbol, que había un campeonato en una iglesia, no nos dijo en cuál; si estábamos interesados y nos pasó su número de teléfono e intercambiamos el número que teníamos y nos dijo que después se iba a poner en contacto. El hombre era Sebastián Mauvezín”, se lee en su declaración anticipada.

“El loco se sentaba en un sofá, el cuarto desordenado, me pedía que me sentara en su falda. Él con el pantalón bajo y yo lo mismo”, cuenta. 

Nunca vi a nadie masturbándose, fue la primera vez y con esa edad tenía la percepción de que estaba mal, pero yo me decía: ‘tendré que hacer esto para jugar al fútbol’”, prosiguió.

Estos hechos dejaron secuelas emocionales y sicológicas en la víctima, pero prefirió no dar más detalles en su declaración anticipada.

A Penadés le decían “el viejo” y era conocido de muchos

Otro trágico episodio involucró a un joven de 17 años que, después de un partido de fútbol en el Parque Batlle, se encaminaba a su hogar en la avenida Rivera en medio de la oscuridad de la noche. Mientras caminaba, un automóvil se aproximó lentamente, siguiéndolo durante varias cuadras, mientras el conductor insistía en que subiera al vehículo. El conductor hacía insinuaciones inapropiadas, como ofrecerle “masajes”, a lo que el joven se negaba rotundamente. El conductor en cuestión era Penadés.

Dentro del círculo de amigos que compartían el juego de fútbol, se advertía acerca de “el viejo”, instando a no ceder a sus propuestas y a denunciar sus acciones.

Sin embargo, fue gracias a la denuncia pública de Romina Celeste Pappaso, alguien ajeno a los jóvenes futbolistas, que finalmente se dio a conocer públicamente la denuncia. A partir de ese momento, el modus operandi de Penadés comenzó a ser desvelado.