Indignante: la Ex vicepresidenta de Colombia y Ex primer ministro Italiano investigados por incitación al soborno en la Fiscalía de Nápoles, Italia

Marta Lucía Ramírez Ex vicepresidente de Colombia

La Fiscalía de Nápoles ha iniciado una investigación sobre el ex primer ministro italiano, Massimo D’Alema, por su presunta participación en un intento de mediación en la venta de naves y aviones de guerra a empresas italianas por parte del Gobierno colombiano. Esta operación, en la que se esperaba un reparto de 80 millones de euros entre los participantes, ha generado controversia y se ha cuestionado la integridad de los involucrados.

Junto a D’Alema, también se encuentran bajo investigación Giuseppe Giordo, ex director general de Fincantieri, así como varios intermediarios que participaron en la operación comercial. En el marco de esta investigación, se han llevado a cabo registros por parte de la Digos en las propiedades de los sospechosos.

Además de los mencionados anteriormente, también se han visto implicados en esta investigación Edgardo Fierro Flores, jefe del grupo de trabajo para la presentación de oportunidades en Colombia, Marta Lucía Ramírez, ex vicepresidenta y ministra de Relaciones Exteriores de Colombia, Germán Monroy Ramírez y Francisco Joya Prieto, delegados de la comisión del Senado colombiano.

De acuerdo con el escrito de acusación, estas personas habrían actuado como promotores de la iniciativa económica comercial para vender productos de empresas italianas con participación pública, específicamente aviones M 346 de Leonardo y corbetas, pequeños submarinos y equipos de astilleros de Fincantieri, a las autoridades colombianas. El objetivo era obtener acuerdos formales y definitivos con un valor económico global de más de 4.000 millones de euros.

En este sentido, se les imputa la presunta violación del artículo 322 bis del Código Penal italiano, que castiga diversas prácticas como la malversación de fondos, la extorsión, la inducción indebida a dar o prometer beneficios, el soborno y la incitación al soborno, así como el abuso de funciones de miembros de tribunales u órganos internacionales de las Comunidades Europeas, asambleas parlamentarias internacionales u organizaciones internacionales y de funcionarios de las Comunidades Europeas y de Estados extranjeros.

En la orden de registro se especifica que Francesco Amato y Emanuele Caruso, asesores para la cooperación internacional del Ministerio de Asuntos Exteriores de Colombia, establecieron contactos con Massimo D’Alema, quien, debido a su trayectoria en cargos de relevancia internacional, actuaba como mediador informal en las relaciones con las empresas italianas. Alessandro Profumo, consejero delegado de Leonardo, y Giuseppe Giordo, director general de la división de buques militares de Fincantieri, son mencionados como las personas con las que D’Alema tenía contacto directo.

El objetivo final de esta operación era facilitar y obtener acuerdos con las autoridades colombianas por un valor total de más de 4.000 millones de euros.