En un almuerzo que se extendió por casi tres horas, Alberto Fernández coincidió con Evo Morales en la posibilidad de ampliar el Mercosur. Litio y entusiasmo compartido ante la posibilidad de que Lula vuelva al poder en Brasil.
Fue un almuerzo distendido, cargado de anécdotas de su paso por la presidencia y su amistad con la Argentina. Pero sobre todo, el almuerzo de Alberto Fernández con el ex presidente de Bolivia, Evo Morales, sirvió para unificar posiciones y establecer un frente común en la región. Esto es: fortalecer la CELAC, sumar a Bolivia y Venezuela al Mercosur y optimizar al máximo la explotación del litio con mano de obra local.
A lo largo de un almuerzo que se extendió por más de tres horas en la Casa Rosada, Alberto Fernández y Evo Morales coincidieron en la necesidad de sumar a Bolivia y a Venezuela al Mercosur en el largo plazo para fortalecer el bloque regional. También se mencionó la idea de establecer acuerdos con las empresas privadas que invierten en el litio en ambos países para que contraten mano de obra de Bolivia y Argentina.
Todo esto se analizará en profundidad en los próximos meses. Es que Evo Morales quedó en trasladar al presidente de Bolivia y su aliado político, Luis Arce, buena parte de los temas dialogados en el almuerzo en la Casa Rosada.
También hubo espacio para las anécdotas. Según comentó el diputado Carlos Heller al terminar el almuerzo, Evo Morales recordó todo el derrotero de su salida de Bolivia luego de lo que denominó un “golpe de Estado” de parte de Jeanine Añez y su exilio forzado en la Argentina.
El Gobierno sólo se limitó a emitir una breve gacetilla del encuentro en la que destacó que Alberto Fernández mantuvo un almuerzo de trabajo en Casa Rosada con el ex mandatario de Bolivia, en el marco del Día de la Confraternidad Argentino Boliviana, en conmemoración del nacimiento de la generala Juana Azurduy.
“El Presidente dialogó con el dirigente boliviano sobre la actualidad de la región, luego de la clase magistral que brindó Morales en la Universidad Nacional de Rosario (UNR) titulada “Presente y futuro de América Latina”, dijeron en el comunicado oficial.
No obstante, se supo que Evo Morales está convencido, y así lo ejecutó durante sus dos mandatos como presidente de Bolivia, que las reservas de litio deben ser controladas directamente desde el Estado. “Esto los volvería potencias en el mundo”, sugirió Morales en una charla abierta que ofreció ayer en Rosario, invitado por la corriente peronista del jefe de la AFI, Agustín Rossi. En el almuerzo en la Casa Rosada no se habló de este tema. Tampoco se evaluó la idea de crear una empresa binacional entre Argentina y Bolivia para desarrollar proyectos de extracción de litio y producción de baterías.
MERCOSUR AMPLIADO
El otro tema que estuvo presente en el encuentro del Presidente y su amigo Morales fue la ampliación del Mercosur. Está latente la idea de sumar a Bolivia al bloque regional que integran Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay. Por ahora, Bolivia participa como miembro adherente del bloque y debe compatibilizar su normativa a las reglas del Mercosur para ser socio pleno. Falta la aprobación del Senado de Brasil para que esto se concrete.
No obstante, el tema estuvo en la charla de la Casa Rosada e incluso se mencionó la posibilidad de pedir que Venezuela vuelva a sumarse al Mercosur. Es que el régimen de Nicolás Maduro fue suspendido durante el mandato de Mauricio Macri del bloque por no cumplir con las normativas del bloque.
La hipótesis de trabajo que se evalúa en el Gobierno es que una eventual victoria electoral de Lula Da Silva en las elecciones presidenciales de Brasil podría acelerar el trámite para reincorporar a Venezuela en el Mercosur ya que la administración de Jair Bolsonaro se resiste a hacerlo.
También se analizó la idea de fortalecer la CELAC, el bloque de América latina y el Caribe para darle sustento a los acuerdos regionales y ofrecer un contrapeso político en el avance de Estados Unidos en la región.
Según consignaron a El Cronista varios de los comensales del encuentro del Presidente con su “amigo entrañable” de Bolivia, como lo llamó a Morales, se trató el tema de Alejandro Benítez, el argentino que murió a raíz de un accidente de tránsito en Bolivia ya que se le negó la atención en un hospital de mayor complejidad. La Cancillería presentó una queja por ello. Alberto Fernández le planteó su preocupación por este tema teniendo en cuenta que hay un convenio de reciprocidad entre ambos países en materia de asistencia sanitaria.
Entre los comensales que se sumaron al almuerzo de Alberto Fernández y Evo Morales estaban los diputados del Frente de Todos, Eduardo Valdés y Carlos Heller; la portavoz Gabriela Cerruti, Agustín Rossi y el designado embajador en Venezuela, Oscar Laborde.
CRONISTA
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