El senador Blas Llano está en EEUU y vuelve el lunes. El llanismo está dividido entre los que quieren acompañar el juicio a la fiscala general y los que no encuentran méritos para enjuiciarla.
Finalmente, la bancada B de la Cámara de Diputados correspondiente al Partido liberal Radical Auténtico (PLRA), que integra el sector llanista, dilatará su decisión de acompañar o no el pedido de juicio político a la fiscala general del Estado, Sandra Quiñónez.
Ayer se reunió el grupo para analizar el tema y tomar una postura, pero finalmente pospusieron cualquier decisión atendiendo a que las posturas de los integrantes de este sector están divididas, ya que un grupo está decidido a votar para enjuiciar a Quiñónez pero otro la defiende.
De acuerdo con el diputado Enrique Mineur, la decisión será adoptada en conjunto y para ello aguardarán la llegada del líder del bloque, el senador Blas Llano, quien regresa el lunes de su viaje a Estados Unidos.
Son ocho los llanistas cuyos votos serán claves para inclinar la balanza a favor del juicio político, pero estos aún se muestran esquivos. Solo Mineur y Édgar Ortiz son los que tienen postura definida y defienden a Quiñónez por considerar loable su labor.
El encuentro de ayer tuvo lugar durante un almuerzo en el domicilio del diputado Marcelo Salinas, donde abordaron la decisión de Añetete de acompañar el juicio político. Fueron claros en señalar que el sector que lidera el presidente Mario Abdo debe ser el primero en dar muestras de compromiso real y firmar el pedido de juicio político que está elaborando la diputada encuentrista Kattya González.
De los ocho integrantes del llanismo, cuatro que podrían votar por el juicio tienen poder de decisión en el Equipo Joven. Los que están en esta línea son los diputados Marcelo Salinas, Sergio Rojas, Manuel Trinidad y José Rodríguez. Su relativa independencia de lo que diga el líder Blas Llano tiene que ver con el fuerte liderazgo que mantienen en sus respectivos feudos, como el caso de Rojas en Itá y el diputado Salinas en Mariano Roque Alonso. Lo mismo que José Rodríguez, que viene del comité de Ñemby, el que más afiliados alberga a nivel del partido. El caso de Trinidad, el diputado altoparanaense tiene que ver con la afinidad con el vicepresidente Hugo Velázquez, quien es su compadre. Consideran que si el oficialismo colorado no se muestra vulnerable, habrá los números para el juicio. Los diputados liberales tampoco quieren quedar pegados a un supuesto blanqueo de Quiñónez, menos en época electoral, y no osarían retar la disposición partidaria que ya en dos ocasiones dispuso votar por el juicio político.
El otro escenario que podría darse es si el cartismo –ante la indefinición y la dilación del proceso– logra partir Añetete y disminuir los votos en ese sector, automáticamente tendrá un efecto cascada y serán más los liberales renuentes a votar por el juicio político.
Urgencia. En definitiva, la bancada llanista se encuentra en asamblea permanente atenta al avance de los acontecimientos.
Hoy se reúne la Comisión Permanente y no se descarta que si ingresa el libelo acusatorio, ya adelanten el pedido de convocar a los diputados.
La Cámara Baja debe reunir mayoría de dos tercios (53 diputados si están los 80). En tanto, corresponderá a la Cámara de Senadores, por mayoría absoluta de dos tercios (30 votos de 45 senadores), juzgar a la acusada y, en caso de encontrarla culpable, separarla de su cargo, según el artículo 225 de la Constitución Nacional.
Se aguardará el regreso del líder del movimiento para tomar una postura conjunta en Diputados y Senadores. Julio Mineur, diputado del PLRA.
UH
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