La princesa Yoko, de 38 años, la primera paciente COVID de la familia imperial japonesa, ha desarrollado una “neumonía moderada” y ha tenido que ser trasladada desde el centro médico del Palacio Imperial, donde estaba aislada, al Hospital de la Universidad de Tokio, dijo la Agencia de la Casa Imperial.
Su hermana, la princesa Akiko de 40 años, con quien tuvo contacto hace varios días, dio negativo en la prueba de PCR, informó Kyodo.
Yoko, prima del emperador Naruhito, se quejó de un dolor de garanta el lunes y ayer se confirmó que estaba infectada. Su ruta de contagio es desconocida, pues en los últimos días no asistió a ninguna reunión social. Hasta el momento no se registrado ningún caso entre el personal que está cerca de ella.
La princesa, hija menor del difunto príncipe Mikasa, primo del exemperador Akihito, es directora de Yuai Jukikai, una corporación de bienestar social con base en Tokio, entre otros cargos honorarios.
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