Más de 25 millones de personas están llamadas este 6 de junio para elegir entre el izquierdista Pedro Castillo y Keiko Fujimori (derecha).
Lima. Tras el cierre de la campaña electoral en Perú, el jueves de 3 junio de 2021, tanto encuestadoras como medios de comunicación peruanos se vieron prohibidos de difundir los resultados de los últimos sondeos de preferencia de votos en ese país. Así lo determinan las normas electorales de Perú.
No obstante, los datos de algunas de estas encuestas se difunden en el exterior. Ese es el caso de un sondeo realizado por el Instituto de Estudios Peruanos (IEP), entre el 2 y el 4 de junio últimos. El estudio muestra que las elecciones de mañana producirían un virtual empate técnico: asigna a la derechista Keiko Fujimori el 40,9% de los votos y al maestro sindicalista peruano Pedro Castillo, el 40,8%.
En lo referente a sexo, la encuesta señala que la hija del expresidente Alberto Fujimori recibiría el apoyo de la mayoría de las peruanas (44,4%), mientras que el maestro de escuela obtendría la preferencia de los varones de su país (46,7%).
En cuanto a edades, los votantes más jóvenes (18 a 24 años) se decantarían por Keiko. Mientras que Castillo tendría la preferencia de las personas de 25 a 39 años (44,3%) y de los más de 40 años (44,1%).
Mientras tanto, el simulacro electoral realizado por la iniciativa global Ipsos Perú. coloca a los candidatos , Keiko Fujimori y Pedro Castillo, con una diferencia de menos de un punto porcentual (0,8%) .
Según la encuesta, Fujimori alcanzaría un 50,4% mientras que Castillo tendría un 49,6% de los votos válidos.
Los candidatos
Los candidatos que buscan la Presidencia de Perú son el maestro y líder sindical, Pedro Castillo, que representa al partido de izquierda Perú Libre.
Castillo enfrenta a la tres veces candidata presidencial, Keiko Fujimori, quien perdió en segunda vuelta las elecciones de 2011 y 2016 ante Ollanta Humala y Pedro Pablo Kuczynski.
Cambio o mantenimiento de modelo
Según los analistas, este domingo 6 de junio, el Perú se juega entre un cambio radical hacia la izquierda o mantener el “modelo” neoliberal que rige en el país desde hace 30 años. Así se observa la contienda entre Castillo y Fujimori.
Más de 25 millones de votantes han sido convocados para participar en la segunda vuelta de las elecciones, tras una campaña cargada de polémicas y ataques personales, así como de una lluvia de propuestas para paliar la crisis económica, social y sanitaria que afronta el país. La mayoría de ofertas de campaña son calificadas de populista.
Entre Castillo y Fujimori se elegirá al presidente que reemplazará al interino Francisco Sagasti el próximo 28 de julio, día central de las celebraciones del bicentenario de la independencia peruana.
Ataques y rumores
La polarizada campaña se ha centrado en un discurso que acusó a Castillo de ser un “comunista” que busca imponer un régimen “chavista” y a Fujimori de representar la corrupción y las violaciones a los derechos humanos que minaron al régimen de su padre, el encarcelado expresidente Alberto Fujimori (1990-2000).
Luego de que ambos candidatos cerraran sus campañas el último jueves con multitudinarios mítines en Lima, el campo de batalla político se ha concentrado en las redes sociales; en estas se ha ratificado la imagen de un país profundamente dividido y en el que pocos aceptan matices entre uno y otro bando.
Transparencia de los comicios
Además de ataques, burlas y amenazas, han arreciado los comentarios que ponen en duda la imparcialidad de los entes electorales, a pesar de los pedidos de respeto que ha hecho el Gobierno y el respaldo que estos han recibido de organismos como las Naciones Unidas y la Organización de Estados Americanos (OEA).
En ese escenario, y mientras todas las previsiones indican que estos comicios serán disputados voto a voto, los organismos electorales reafirmaron que garantizan la “transparencia y confiabilidad” de los resultados.
El presidente del Jurado Nacional de Elecciones (JNE), Jorge Luis Salas, aseguró que el sistema trabaja “de forma intensa y coordinada para asegurar la transparencia y limpieza de la segunda elección presidencial”, tal como ocurrió en los comicios generales del pasado 11 de abril.
El jefe del máximo organismo electoral resaltó que el balotaje será supervisado por 150 observadores internacionales, entre ellos de la OEA, la Unión Europea (UE) y la Unión Interamericana de Organismos Electorales (Uniore).
Por su parte, el jefe de la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE), Piero Corvetto, remarcó que la ciudadanía debe tener “la absoluta certeza” de que los resultados serán “el fiel reflejo” de la voluntad de los ciudadanos.
Precisamente, la labor de estos organismos fue respaldada por el jefe de la Misión de observación electoral de la OEA en Perú, Rubén Ramírez, quien les expresó su apoyo “ante los recientes ataques que buscan minar la confianza en el actual proceso y socavar su autonomía”.
El Ministerio de Defensa ratificó, a su turno, el rol constitucional de las Fuerzas Armadas y su “compromiso de respetar la voluntad del pueblo expresada en las urnas”..
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Estudio refleja empate técnico entre Pedro Castillo y Keiko Fujimori
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