Una historia de sangre que alarma al mundo

 

Palestinos reclaman su territorio que los Israelitas arrebataron en complicidad con otras naciones donde la Agencia Judía, impone políticas internacionales.

 

Basta ya la masacre, basta ya de muertes de inocentes, que se pronuncien ahora la ONU, cómplice de este despojo. Criticamos los occidentales sus comportamientos culturales, pero desconocemos su historia.

 

 

La guerra árabe no es de ayer ni de hace unos años, tampoco empezó con el derrumbe de la torres gemelas en EEUU, este conflicto tiene varios siglos pero podemos remontarnos a principios del siglo pasado cuando el grupo sionista empieza a dejar escuchar su voz en el reclamo por un territorio que querían sea justamente en lo que le correspondía a los Palestinos, comunidades cristianas y musulmanas, con una pequeñísima población de judíos, que tenían influencias especialmente en los alrededores de Jerusalén.

 

Los Palestinos formaban el imperio Otomano, que en 1914 decidió entrar en la 1era Guerra Mundial, lo que motivo que el gobierno británico viese con buenos ojos el movimiento sionista, para contrarrestar a Palestinos, pues era una guerra donde los aliados no estaban bien, y es así que en 1917, David Lloyd George y Arthur Balfour, primer ministro y secretario de exteriores respectivamente hicieron alianzas estratégicas con los sionistas y estimularon a los Estados Unidos a entrar en la guerra. En el acuerdo se establecía que los británicos veían con buenos ojos las intenciones de los judíos con respecto al territorio palestino, que al derrocamiento de los otomanos, Gran Bretaña se queda en poder político del territorio por los siguientes 30 años.

 

 

Durante la década de los 20´s, la población judía paso de 83.720 a 156.481, en una población global menor al millón de habitantes esta migración judía fue impulsada por la Organización Sionista Mundial, liderada por Jaim Weizmann, hasta mediados de los 30´s que bajo el liderazgo de David Ben Gurión, se empezó ya a dar luz a las intenciones de crear una nación judía

 

Según los cálculos de las autoridades palestinas, cerca del 70 por ciento de las víctimas de los ataques de Israel eran civiles. Hasta ahora se contabilizan 22 menores, 15 mujeres y 12 personas de edad avanzada entre los muertos, según información oficial. Mientras los palestinos estaban en conflictos internos entre los clanes Husseinis y Nashashibis. Aunque la violencia entre judíos y palestinos se inicia en 1928, es hasta el año siguiente, 1929 en que la matanza de Hebron y Safed se saldan con 133 judíos y 116 árabes muertos

 

 

Con la llegada al poder de Hittler en Alemania, se incrementó el sentimiento antisemitismo, obligando a los judíos abandonar Europa y refugiarse en el territorio palestino, en 1936 la población se incrementó a 370.483 de un total de 1.336.518, situación que creo la desconfianza árabe y en 1936 se dio la Revuelta Árabe, y entraron las fuerza militares británicas junto con el movimiento Agencia Judía, para atacar a los palestinos. Los estudios realizados por diferentes universidades establecieron que era imposible pudieran convivir dos culturas tan opuestas, por lo que se recomendaba la división del territorio.

 

 

En 1937 Malcolm Mac Donald, ministro británico de Colonias pone fin al compromiso británico con los judíos iniciado dos décadas antes, esto debido a la situación de la venida de la 2da Guerra Mundial y establecía que en el plazo de diez años Palestina se convertiría en un solo Estado independiente gobernado en común por árabes y judíos. Pero el grupo judío Haganá empezó a comprar y a fabricar armas y las actividades los judíos clandestinos, Irgun Zvai Leumi (Organización Militar Nacional) y Leh’i (Luchadores por la Libertad de Israel), que representaban la tradición de extrema derecha del sionismo, representaban un problema para los británicos, es así que un joven judío polaco, Menahem Begin en febrero de 1944, dirigente de  Irgún, proclamó que los británicos habían traicionado al pueblo judío y declaró la guerra.

 

La organización de la Agencia Judía, era superior a las naciones árabes en derredor, por lo que no había condiciones para un enfrentamiento para el que ellos no se habían preparado y los judíos tenían décadas, y entra en escena Harry S. Truman,presidente que tenía simpatía por la causa judía de obtener una nación solo para ellos, generando una reacción británica opuesta que desato el ataque contra el Hotel Rey David de Jerusalén, que era el cuartel general británico y termino con la salida de estos de Palestina, dejando 91 muertos.

 

 

Fue el 29 de noviembre de 1947, que la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó el Plan de Partición de Palestina en dos Estados, uno árabe, 46% del territorio (11.500 km²) y a los judíos el 54% (14.100 km², de los cuales 11.750 km; conformarían un corpus separatum de 700 km² bajo la administración del Consejo de Administración Fiduciaria de las Naciones Unidas.

 

El 13 de mayo de 1948 los judíos proclamaron la independencia del Estado de Israel en su parte del territorio otorgada por el Plan de Partición de la ONU.. Esta declaración provocó como reacción inmediata la invasión de los ejércitos de la alianza árabe  de los cinco estados árabes vecinos (Líbano, Siria, Transjordania, Irak y Egipto), dando así inicio a la guerra árabe-israelí

 

Ben Gurion, que inauguró el cargo de primer ministro del Estado de Israel, pero tenía un viejo pensamiento de fondo: en carta a su mujer confió que decía:

 

un Estado judío “parcial” –un proyecto de 1937 del ocupante británico que nunca se llevó a cabo– era sólo un comienzo y que planeaba organizar un ejército de primera y utilizar la coerción o la fuerza para absorber toda la extensión del país.

 

 

La guerra provocó miles de desplazados en ambos sentidos: árabes de la zona israelí fueron obligados a desplazarse a las vecinas Gaza y Cisjordania, y también a otros países árabes más alejados, dando origen al problema de los refugiados palestinos, que todavía hoy perdura. 

 

La Guerra de Suez en 1948, Aunque militarmente los aliados alcanzaron todos sus objetivos, la presión diplomática conjunta de la Unión Soviética y EE. UU. los obligaron a retirarse

 

En este contexto, los árabes comenzaron a organizarse la más importante fue la OLP (Organización para la liberación de Palestina), fundada en mayo de 1964 en Jerusalén con el apoyo de la Liga Árabe y a instancias del presidente egipcio Gamal Abdel Nasser,

 

 

Al día de hoy, las principales cuestiones son la soberanía de la Franja de Gaza y Cisjordania, la eventual formación de un Estado palestino en dichas áreas, el estatus de la parte oriental de Jerusalén, de los Altos del Golán y de las Granjas de Shebaa,el destino de los asentamientos israelíes y de los refugiados palestinos,el reconocimiento de Israel y Palestina y de su derecho a existir y vivir en paz al abrigo de amenazas y actos de fuerza, así como la relación de Israel con Siria y el Líbano.